viernes, 18 de enero de 2013

Sugerencia: Llorar a lágrima viva. Oliverio Girondo

Paul Klee,  refuge


Llorar a lágrima viva


Llorar a chorros.
Llorar la digestión.
Llorar el sueño.
Llorar ante las puertas y los puertos.
Llorar de amabilidad y de amarillo.

Abrir las canillas,
las compuertas del llanto.
Empaparnos el alma,
la camiseta.
Inundar las veredas y los paseos,
y salvarnos, a nado, de nuestro llanto.

Asistir a los cursos de antropología,
llorando.
Festejar los cumpleaños familiares,
llorando.
Atravesar el África,
llorando.

Llorar como un cacuy,
como un cocodrilo...
si es verdad
que los cacuies y los cocodrilos
no dejan nunca de llorar.

Llorarlo todo,
pero llorarlo bien.
Llorarlo con la nariz,
con las rodillas.
Llorarlo por el ombligo,
por la boca.

Llorar de amor,
de hastío,
de alegría.
Llorar de frac,
de flato, de flacura.
Llorar improvisando,
de memoria.
¡Llorar todo el insomnio y todo el día!

Oliverio Girondo

3 comentarios:

  1. Ramon, obrigada pela sugestão, um poema d'alma.
    Um abraço
    oa.s

    ResponderEliminar
  2. Y qué a gusto se queda una después de una buena llorera. ¡ Te quitas años de encima, peso, dolores...!
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Liviandad tras llorar todos los males, todos los bienes. Asignatura aprobada por el alma.

    Saludos

    ResponderEliminar